Bogotá, febrero de 2019

El nivel de empleo o desempleo en un país está asociado a la productividad y calidad de vida de sus habitantes. En Colombia, durante décadas la cifra de desempleo ha estado presente en la agenda pública de los gobernantes con el propósito de reducirse y después mantenerse en un solo dígito.

En materia de productividad, el panorama en Colombia no resulta alentador, dado que, según cifras del Departamento Nacional de Planeación, el año pasado, el crecimiento de niveles de productividad en el país solo representó el 0.08% comparativamente al año anterior, es decir, en el 2017 fue de 0.44 y en el 2018 de 0.52.

La generación de empleo en la economía nacional es una responsabilidad que comparten las empresas y el Estado. Este último suele aportar incentivos en diversos sectores para que generen más y mejores empleos, se amplíe la oferta en industrias específicas o para un nicho particular de la población. En Colombia, por ejemplo, algunas de las normativas legales más promovidas, han sido las relacionadas con incentivar el empleo de las personas en condición de discapacidad o la ley del primer empleo que tiene como finalidad ofrecer alternativas de empleo formal a jóvenes sin experiencia.

“Para generar más y mejores empleos, es necesario que las empresas de los diversos sectores industriales se enfoquen en el desarrollo del negocio y la productividad de sus trabajadores, no solo para favorecer su crecimiento, también para contribuir en el desarrollo de las personas y hacer de ellos mejores profesionales”, así lo asegura Daniel Parra, gerente de Permanent Placement de Adecco Colombia.

Al interior de las empresas, la generación de nuevos empleos está directamente relacionada con el crecimiento o expansión del negocio y la necesidad específica de incrementar el personal para atender los nuevos requerimientos. En el caso de generar mejores empleos, estos dependen de muchos más factores relacionados no solo con el cargo como tal, sino con el entorno en el que el mismo se desenvuelve. Los mejores empleos están relacionados con la estabilidad, el tipo de empresa, industria o sector, la remuneración salarial, el tipo de contrato, la cultura organizacional, la posibilidad de crecimiento profesional, el salario emocional entre otros.

En cuanto a la escala salarial, esta puede ser generada como indicador entre la relación que existe entre el salario y la jerarquía de los cargos según su complejidad, responsabilidad e impacto organizacional. Dichos rangos de remuneración se definen de acuerdo a las tendencias del mercado, información específica de cada posición, sus funciones, importancia y nivel de criticidad.

Más allá de establecer una matriz de salarios por empleado, una estructura adecuada de compensaciones permite desarrollar una estrategia sólida para atraer y retener a empleados calificados, reconocer el buen desempeño y fortalecer el alcance y resultados del plan estratégico de la organización.

“Las organizaciones cuentan con una gran oportunidad para hacer de ellas un lugar atractivo para los trabajadores, mientras garantizan un ambiente laboral estable y justo para cada uno de sus miembros. Este propósito facilitará generar más empleos y aumentar la formalidad laboral en el país, uno de los objetivos del actual Plan Nacional de Desarrollo, una meta posible de materializar en el país”, puntualiza Parra.

Reinventar la estructura organizacional de las empresas ayudará a potencializar la calidad de las mismas, así como fortalecer la capacidad y competencias de su talento humano como profesionales altamente calificados, cuyo principal valor agregado será incrementar su productividad y proyectar su carrera hacia mejores posiciones orientados al logro de excelentes resultados.

Acerca del grupo Adecco

El grupo Adecco es la firma global líder en gestión de talento humano, con un gran portafolio de servicios en recursos humanos, consultoría, formación y headhunting, entre otros. Cuenta con más de 33.000 empleados en 60 países y más de 100.000 clientes alrededor del mundo.